domingo, marzo 04, 2012

Días como estos

Hoy me empezó mi periodo menstrual, como cada veintiocho días desde hace doce años. Siento dolor, bochorno y nuevamente dolor. También tengo infundados deseos de llorar. Pienso en todas las bromas que se hacen sobre esta etapa normal de la mujer. No es gracioso. En momentos como estos me digo que jamás seré madre.

Quiero ir a la piscina. No se nadar, pero siento una conexión especial con el agua. Me gusta sentirme dentro de ella.

También me gusta sentir el agua dentro de mí. Estoy bebiendo más agua que antes. Le encuentro un sabor agradable, más agradable que el café.

La semana pasada compré una notebook. No una portatil. Ésta tiene hojas y una pasta llena de flores de diferentes colores. Es perfecta para apuntar las nuevas palabras y frases que escucho.

Estoy cantando en la ducha. Mientras el agua cae en mi cabeza, canto. Tengo un micrófono imaginario y un público que se refleja cuando me veo en el espejo. Ésa esa es mi gente, me digo eufórica.

Me molesta no escribir. Me molesta no ser disciplinada. Me distraigo con facilidad y con frecuencia. Quiero escribir ahora y lo que venga después.

Me he dado cuenta que casi no tengo amigos. A los de infancia los perdí porque dejé de pensar igual que ellos. A los que hice después, se fueron yendo uno a uno. Siento que es mucho mejor. No me inspira confianza tener un 'millón de amigos'.

Me hace bien leer. He leído toda mi vida. No creo que la literatura se divida en buena o mala. Tampoco creo en los buenos o malos libros. Lo que sí creo es que soy una lectora en pañales.

Hay un gato en mi techo que tiene una herida grande en el cuello. Mañana llamaré a la doctora para que lo venga a ver. Le estoy dando de comer camote y pollo a la brasa. Se pondrá bien, merece vivir mucho más que algunos humanos.

Veo a mucha gente que se da golpes moralistas en el pecho. Es la misma gente que tiempo atrás ni siquiera conocían esa palabra. Estoy a favor de que las personas cambien, lo que me parece detestable es que critiquen con insistencia ciertos actos que ellos mismos hicieron anteriormente. Hay otras formas de enseñar, hay maneras. Por lo pronto, mejor se les ve calladitos.

La semana pasada vino mi familia. Mis tíos abuelos, mis tíos y mis primos. Me sentí contenta. Quiero que vengan más seguido. Ahora entiendo cuando dicen que la sangre llama a la sangre.

Días como estos camino descalza. Días como estos se reducen grandiosamente a ser mujer. A beber agua. A cantar en la ducha. A tomar apuntes. A leer. A ver al gato en mi techo. A reírme de la gente. A disfrutar a mi familia. Días como estos.


4 comentarios:

  1. Me gusta tu manera de escribir tan natural.

    Que sigas disfrutando tus días, chica linda.

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  2. Hola... acabo de encontrar tu blog .. escribes muy bien =) felicitaciones =) sigue así =)...

    Karent
    http://tulipanesenmipuerta.blogspot.com/

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  3. Me gustaron tus escritos, estoy leyendo todos de esta primera página y quedé enganchado con todos. Muy buenos.

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